El tratamiento con HIFU (ultrasonido enfocado de alta intensidad) es un nuevo tratamiento no invasivo que puede ayudar a mejorar la apariencia de las arrugas y las líneas finas. En esta publicación de blog, analizaremos cómo funciona la terapia HIFU, cuáles son los beneficios y quién puede beneficiarse de este tratamiento.
¿Cómo funcionan los tratamientos con HIFU?
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Los tratamientos con HIFU se basan en la aplicación de ultrasonidos de alta intensidad en la capa subcutánea de la piel. Estos ultrasonidos penetran profundamente en la piel, lo que aumenta la temperatura en esta zona. El aumento de la temperatura produce un efecto en las fibras de colágeno, que se contraen y se fortalecen. Esto produce una mejora visible en la apariencia de las arrugas y las líneas finas.
¿Cuáles son los beneficios de los tratamientos con HIFU?
Los beneficios de los tratamientos con HIFU incluyen una mejora visible en la apariencia de las arrugas y las líneas finas. También se ha visto que este tratamiento aumenta la producción de colágeno, lo que mejora la elasticidad de la piel. Otro beneficio es que no requieren ningún tiempo de inactividad, por lo que es ideal para las personas que no pueden permitirse el lujo de tomarse unas vacaciones para someterse a un tratamiento invasivo como el lifting facial.
En resumen, los principales beneficios de los pacientes de este tratamiento son los siguientes:
- Resultados prácticamente instantáneos. Aunque es cierto que tras varias sesiones los resultados son más visibles, los resultados se aprecian desde el primer tratamiento.
- Estimula la producción de colágeno, aportando brillo y elasticidad a la piel
- Es más económico que una intervención quirúrgica
- No requiere tiempo de inactividad, ni una recuperación tras el tratamiento
- Es apto para todo tipo de pieles
- Puede aplicarse en todas las estaciones del año
- Destruye los adipocitos definitivamente, aunque eso no supone que no puedan salir nuevos.
Contraindicaciones del tratamiento con Hifu
Este tipo de tratamiento generalmente no da ningún efecto adverso, pero en algunos casos pueden darse los siguientes:
- Sensación de entumecimiento y/o hormigueo en la zona tratada
- Enrojecimiento de la piel
- Ligera inflamación en el área tratada
Para evitar cualquier tipo de complicación o efecto secundario, es importante que el tratamiento sea realizado por un profesional de medicina estética o un profesional estético cualificado.
Además, hay que tener en cuenta que si presentas alguna de las siguientes afirmaciones, debes comunicárselo al especialista para que valore si puedes realizarte el tratamiento sin ningún riesgo.
- Presentas heridas en la zona a tratar
- Tienes marcapasos
- Padeces problemas hemorrágicos
- Sufres epilepsia
- Estás embarazada o crees que puedas estarlo
- Tienes enfermedades de la piel
¿Quién puede beneficiarse de los tratamientos con HIFU?
Los tratamientos con HIFU son seguros para la mayoría de las personas. Sin embargo, estos tratamientos no son adecuados para las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. También se debe tener cuidado al utilizar este tratamiento en personas con implantes metálicos, como prótesis de cadera o válvulas cardiacas.
El público que más se puede beneficiar de este tratamiento con hifu son las personas, tanto hombres como mujeres que presenten flacidez y no consigan eliminar la grasa localizada ni con ejercicio ni con dietas en zonas como brazos, abdomen, glúteos, etc. Este tratamiento se suele recomendar a partir de los 30 años.
Cada sesión suele variar entre los 30 minutos y las 2 horas, dependiendo de las zonas tratadas y la cantidad de grasa y/o flacidez que presente la persona
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