IPL (Luz Pulsada Intensa): Un método efectivo contra las rojeces de la piel (rosácea) y el acné
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La rosácea, también llamada acné rosácea es una condición muy común de la piel que se caracteriza por la aparición de manchas rojas en la piel. Esta afección, causa enrojecimiento de la cara que finalmente deja visibles los vasos sanguíneos y capilares dilatados permanentemente, dotando a la piel de un color rojo casi permanente, especialmente en las mejillas, la nariz y la zona inferior del rostro. Con el tiempo pueden aparecer protuberancias rojas o lesiones de acné.
Recientemente, el uso de un nuevo tratamiento llamado IPL o Luz Pulsada Intensa ha revolucionado el tratamiento de muchas afecciones de la piel como la rosácea. Los tratamientos de IPL (Luz Pulsada Intensa) son muy eficaces para cerrar los vasos sanguíneos agrandados que causan la aparición de las rojeces en la piel que se observa en pacientes con rosácea. Este tratamiento es más suave que los tratamientos habituales con láser produciendo menos molestias y sin dejar signos visibles en la piel después de las sesiones, ya que con otros tipos de terapias, suelen aparecer moratones.
¿Cómo funciona el tratamiento IPL o Luz Pulsada Intensa?
El IPL o Luz Pulsada Intensa utiliza un destello de luz brillante visible que cierra los vasos sanguíneos y capilares que causan enrojecimiento y la aparición del rostro rojo. Emplea un filtro que libera un color específico luz, el cual es absorbido o recogido por los vasos sanguíneos de la piel de forma única, actuando directamente sobre la piel. Así, los haces de luz del IPL afectan solamente a los vasos sanguíneos dilatados en la piel y no se lesiona las zonas no afectadas.
Cuando la energía de la luz IPL es absorbida por los vasos sanguíneos dilatados, estos se lesionan y cierran, haciendo que las rojeces desaparezcan. Los resultados son verdaderamente notables.
Este tipo de tratamiento es altamente recomendable, ya que no es invasivo. Los láseres habituales suelen causar hematomas y quemaduras en la piel que a veces, pueden dejar manchas blancas en el rostro. Estos problemas han limitado la utilidad de este tipo de láser en la cara haciendo que la IPL sea la elección adecuada para este tipo de afecciones.
¿En qué consiste el tratamiento?
Los tratamientos de IPL son muy rápidos, simples y relativamente indoloros. La persona que se somete a este tipo de tratamiento debe protegerse con gafas especiales para evitar el contacto con la luz del láser. Además, se aplicará sobre la piel un gel calmante para mayor comodidad y mejorar la eficacia del tratamiento. No se utiliza un anestésico tópico, ya que no es necesario y puede interferir con la eficacia del tratamiento.
El cabezal de tratamiento IPL se coloca sobre la piel y un brillante destello de luz se activa para tratar las áreas rojas. Toda la cara será tratada con una serie continuada de destellos. Se experimenta un pequeño chasquido cuando el flash llega a la piel, pero se tolera muy bien.
Después del tratamiento, se aplican compresas frías en la piel para refrescarla. La piel puede adquirir un color rosa que desaparecerá después de una hora o así, pero no habrán hematomas o lesiones muy visibles en la piel, como sucede a menudo con los tratamientos con láser convencionales.
¿Dónde puedo acudir para realizarme un tratamiento IPL?
Se debe acudir siempre a centros especializados y debidamente certificados en el empleo de esta técnica, tales como clínicas de belleza o centros de estética especializados, que certificarán que son especialistas en la utilización de esta técnica. En Láser Belleza puede realizarse este tratamiento para la rosácea.